El aburguesamiento en Echo Park deja fuera a latinos, que por décadas le dieron vida cultural y tradición.
Por JENNIFER RODMAN
EL NUEVO SOL
El día de hoy, el 58.5% de los residentes de Echo Park son hispanos, pero no hace mucho tiempo, ese número era más grande.
Esta comunidad era el lugar donde la mayoría de los residentes eran de origen latino, pero en 2011, Echo Park comenzó a modernizarse (gentrificación), los precios de la vivienda subieron e iniciaron los desplazamientos. La falta de vivienda se convirtió en un problema.
Recientemente las autoridades hicieron una renovación de 45 millones de dólares en el lago que lleva el mismo nombre y es un símbolo de este vecindario: Echo Park Lake.
En el largo tiempo que yo he vivido en esta comunidad, dijo Mirna Rodríguez, “siento que ha habido un gran cambio en lo que respecta al alquilar y también a los complejos de viviendas. Ya no se siente como cuando crecía, la base de la comunidad, la cultura , las minorías, etc…”.
Rodríguez explicó que ahora hay muchas cafeterías y bares que aportan dinero a las tiendas familiares, pero ¿qué paso con las tiendas antiguas, por ejemplo, La Guadalupana? Ellos cerraron porque el alquiler se fue por las nubes y aún el lote permanece vacante hasta el día de hoy.
“Ahora mi pobre madre necesita tomar el autobús hasta la calle Sunset Blvd. y Alvarado para hacer sus compras”, expresa Rodríguez. “Ella tiene un pie fracturado”.
Agrega que, en años recientes, las comunidades de Echo Park, Silver Lake, Highland Park y otras alrededor han cambiado bastante, particularmente en Los Ángeles donde los hispanos eran la mayoría.
Un cambio demográfico drástico que está cautivando nuevos tipos de negocio, trajo a gente de diferente raza a comprar hogares que eran de latinos, simplemente subieron la renta y empezaron a sacar a la gente de color, enfatiza.
“Crecer en Echo Park a finales de los 90 y principios del 2,000 fue increíble!”, expresa Rodríguez. “Fueron esos tiempos los que para mí realmente definen Los Ángeles”.
“Nací y crecí en Echo Park, en una de nuestras calles principales, un lugar que muchos conocen, incluso los que no son de aquí: Sunset Blvd”, recuerdan con nostalgia.
La residente latina expresa que los cambios comenzaron durante su adolescencia, cuando mis vecinos se iban y veían entrar a nuevos vecinos. Los nuevos residentes hablan un poco diferente y tenían un comportamiento como si no quisieran conocernos.
“Eso era extraño para mí, porque anteriormente nuestros vecindarios eran muy unidos”, explica.
Actualmente Echo Park está lleno de nuevos negocios como cafeterías, bares, restaurantes y renovaciones de apartamentos. Las escuelas de la comunidad Logan Elementary School y Alexandro Elementary School donde fueron todos los jóvenes de este barrio es todavía un símbolo para las jóvenes de hoy.
Echo Park era un lugar donde las familias se reunían y tenían picnics y fiestas de cumpleaños en el parque todos los fines de semana -agrega-, “se celebraba el festival del loto donde los lugareños se unían y tenían un espectáculo de fuegos artificiales al final”.
Estas celebraciones simples y básicos en la comunidad son las que una vez trajeron alegría a nuestro vecindario, recuerda Rodríguez.
Ahora, Echo Park trae a los hipsters, las tiendas vintage, los cafés y los restaurantes veganos que nos brindan un sabor vibrante a todos, pero deja atrás a la comunidad hispana y sus tradiciones, aromas y sabores.
Leonides Márquez, un vecino que ha vivido en Echo Park por décadas, dice que ha sido un sentimiento agridulce ver a su vecindario convertirse en lo que es hoy.
Explica que la modernización que se produjo en los alrededores ha impactado el área drásticamente y ha convertido rápidamente a Echo Park en un nuevo lugar de moda para los aspirantes a artistas, músicos, magnates de los negocios y empresarios que se abren camino hasta el centro de la ciudad.
Agrega que con el estadio de los Dodgers y bares locales a minutos de Sunset Blvd, es una excelente ubicación para que los recién llegados quieran aterrizar en Los Ángeles.
Sin embargo, ¿cómo ha funcionado la nueva luz de interés para los lugareños que han vivido en Echo Park durante décadas?
El desplazamiento se ha producido a través de los años. Márquez menciona que algunos lugareños vendieron sus casas, lo que llevó a la construcción de nuevos edificios con aumentos de alquiler mucho mayores.
“Los nuevos apartamentos o casas tienen precios que la mayoría de los nativos del área no pueden pagar”, explica. “Obligando a la gente a mudarse a otras áreas a millas de distancia”.
Subraya que el sabor es agridulce porque es una comunidad mucho más segura que se enorgullece de tener menos violencia de pandillas.
“No puedo negar que ha sido un impacto positivo para la comunidad, pero sin la cultura latina, siempre habrá un sentimiento de vacío”.
Subraya que Echo Park es un lugar lleno de potencial, pero si esta nueva etapa incluyera a la comunidad hispana, este vecindario pudiera ser un lugar grande y lleno de oportunidades para todos.
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