Estudiantes internacionales encuentran que VITA es útil debido a la complejidad del sistema estadounidense de impuestos.

Por NICOLE MARTÍNEZ y CHRISTOPHER FARÍAS
EL NUEVO SOL

La Clínica VITA en CSUN ha proveído su servicio gratuito para los estudiantes y comunidad por 48 años. La estudiante de tercer año en la Universidad del Estado de California en Northridge (CSUN), Elisa, es una de los estudiantes que ha sabido aprovechar estos servicios.

Ell no solo se dedica a su carrera en ciencias política, sino también forma parte del equipo de tenis en la universidad. Con solo 20 años de edad, Elisa ha sido campeona tres veces en el campeonato nacional en Suiza y dos veces campeona en Francia. Adicionalmente, ella habla cuatro idiomas: inglés, francés, suizo y alemán. Entre ir a la escuela y jugar tenis, también es una estudiante que trabaja.

Su tutor académico la ayudó a obtener información sobre la Clínica VITA. La primera vez que ella hizo sus impuestos, Elisa recalca sentirse satisfecha sobre los servicios y por eso dice que ella regresó por segundo año consecutivo.

“Yo ya trabajé con VITA mi primer año y ahora que vine otra vez, el proceso fue básicamente igual”, dice. “La ayuda es excepcional y te explican todo sobre cómo hacer los impuestos y qué necesitas para obtenerlos”.

La clínica VITA tiene días especiales dedicados a estudiantes que pertenecen a ciertos grupos como estudiantes indocumentados, internacionales, con discapacidad auditiva, etcétera. Los estudiantes internacionales tienen el día jueves especialmente para ellos. Elisa nos cuenta que cómo ella es clasificada estudiante internacional, el proceso es un poco más complejo y ella en realidad sí ocupa la ayuda de VITA.

Hacer sus impuestos en su tierra nativa es más fácil porque en los Estados Unidos, el papeleo requiere más información. También tiene que comprobar que en cuanto termine sus estudios en los Estados Unidos, ella regresará a Suiza y no quedarse a trabajar aquí.

Los estudiantes internacionales como Elisa charlan sobre obstáculos que encuentran cuando hacen sus impuestos y a la misma vez promueven la clínica VITA.

“Siempre hablamos sobre eso [los problemas]”, dice. “Es mucho más complicado que en nuestros países y por eso todos nos juntamos para resolverlos [los problemas] juntos.

Ella nos asegura que no cambiaría nada sobre VITA porque sabe que los preparadores de impuestos están haciendo lo posible para ayudar.

“Son voluntarios y no hay nada de que quejarse”, contó Elisa.

Antes de ir a VITA, ella hizo una cita por internet. Preparar sus impuestos duró aproximadamente una hora. Ella nos dice que a veces el proceso puede durar más si el papeleo es complicado.

Elisa persuade a estudiantes que hagan sus impuestos con VITA porque el servicio es gratuito y obtienen dinero de sus impuestos.

“A veces es mucho dinero y eso motiva a los estudiantes que vengan”, dijo.

Aunque Elisa admite que preparar impuestos en otro país puede ser difícil y largo, ella se ha adaptado a la cultura estadounidense y aprecia los servicios que VITA ofrece para los estudiantes internacionales como ella.