El abuso verbal es algo que todo trabajador de servicio enfrenta

Yo me fui pensando que me iba a correr por una persona sin escrúpulos, la cual me hizo hacer algo que no era parte de mi trabajo y yo lo hice por ser buena gente.

Por YESENIA DELGADO 
EL NUEVO SOL

Es muy común que los días festivos los restaurantes estén llenos de gente. Mi trabajo no era la excepción, la gente llegaba a esperar alrededor de 3 horas por una mesa, sobre todo el día de las madres del 2015.

Ese día nunca se me va a olvidar, porque mi jefa había puesto 3 reservaciones de 30 a 35 personas cada uno al mismo tiempo y solo había mesas para un solo grupo. Como pude, le pregunté a unos compañeros que me ayudaran a mover unas mesas que eran para 3 ó 5 personas para poder poner uno de esos grupos. Esto me tenía toda nerviosa porque la gente se quejaba conmigo en vez de quejarse con mi jefa. Ese día ella no estaba, estaba mi otro jefe y yo andaba con los nervios de punta.

Para poder saber qué mesas estaban desocupadas, tenía que caminar todo el tiempo alrededor del restaurante. En ese momento, una señora me detuvo desde su mesa y me preguntó: “oye, puedes ver si nuestra comida ya va a salir, porque hemos esperado mucho tiempo”. Yo le contesté: “sí, me puedo fijar por usted”.

Me dirigí a la línea de comida, pregunté y no tenían su comida todavía. Regresé con la señora y le dije: “sí, su comida todavía no está lista, va a tener que esperar un poco más”. Ella no me dijo nada y continué con mi trabajo. Ya cuando se había calmado la hora pico, estaba en mi área de trabajo al frente del restaurante, donde mi jefe y yo estábamos hablando de lo loco que fue ese día, cuando llegó la misma señora. Cuando llegó le dijo, mirando a mi jefe: “su trabajadora nos dijo muy groseramente que nuestra comida no iba a estar lista, (volvió la mirada a mí, muy feo) YA SÉ QUE VA A TARDAR MUCHO”. Me sentí muy mal y sin pesar dije: “no me refería de esa manera”. Al instante que ella iba a hablar, mi jefe levantó la mano y me dijo: “puedes ir a limpiar el área de enfrente”.

Yo me fui pensando que me iba a correr por una persona sin escrúpulos, la cual me hizo hacer algo que no era parte de mi trabajo y yo lo hice por ser buena gente. Después de un momento, regresé con mi jefe a mi área de trabajo, con lágrimas en los ojos. Yo ni podía hablar pensando que me iba a regañar, cuando él levantó el dedo índice y me dijo: “NUNCA dejes que nadie te a haga sentir menos y mucho menos que te haga llorar”. Después que dijo eso, empecé a llorar aún más. No podía creer lo que estaba diciendo.

Según el artículo por el Centro Laboral de UCLA sobre el tema de trabajadores jóvenes, I am a #YOUNGWORKER dice lo siguiente “Un enfoque que asume ‘que el cliente siempre tiene la razón’ en ocasiones contribuye a una relación de desigualdad, hasta abuso entre los clientes y empleados. Privilegiando al cliente en toda situación puede crear y en algunas ocasiones motivar el cliente a que tenga una mala conducta mientras poner en peligro el bienestar del trabajador.”

La señora que me insulto tal vez pensó que, hacia lo correcto, pero no se puso a pensar en la situación en la que estuvo el personal. Mi anécdota ilustra cómo las personas tratan a la gente que trabajan en el servicio público, realmente tienen que trabajar en un lugar así para poder entender cómo es el trabajo.

Esta situación nunca la he olvidado, siempre cuando alguien me pregunta ¿qué ha sido el consejo que nunca has olvidado?  Les digo lo que me dijo mi jefe. Y vivo por ese consejo, nunca voy a dejar que nadie me haga sentir menos. Aprendí a no llorar y ser fuerte. Al mismo tiempo aprendí que la persona que menos lo esperas va a ser alguien muy importante en tu vida como fue mi exjefe.

Sé que historia es una de pocas donde el jefe defiende a su empleado y se enfrenta al cliente. Pero para otros es totalmente lo contrario en donde el jefe o el dueño se pone a favor del cliente. En todo trabajo debe ver aprendizaje para el abuso verbal donde el trabajador puede aprender sus derechos y que hacer en situaciones como esta.

De no ser así existe La Cláusula de Deber General de la Ley OSH (Occupational Safety and Health Act – Ley de Seguridad y Salud Ocupacional) este programa ayuda al trabajador a citar a su empleador en caso de que no estén proporcionando entrenamiento para el abuso verbal. Para cualquier duda se encuentran disponibles en el sitio Web de OSHA en www.osha.gov.


Tags:  #TrabajadoraJoven #YoungWorkers Abusoverbal OSHA UCLA Labor Center Yesenia Delgado

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Yesenia Delgado
Mi nombre es Yesenia Delgado, nací en México Michoacán y soy estudiante de la Universidad del Estado de California en Northridge. Estoy estudiando interpretación y traducción del español y una especialidad de periodismo en español. Me gusta escribir sobre temas de mi agrado como los video juegos, las películas, los eventos especiales, los libros y cosas similares. Disfruto escalar las montañas, ser uno con la naturaleza, también me gusta jugar video juegos e ir a los cines cada fin de semana.




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