Voces | Voices / 02/25/2018

Mi hermano me demostró que todo puede cambiar

“Lo que mi familia sufrió por casi 20 años fue algo que muchas familias sufren”.

Por CHRISTINA RODRÍGUEZ
EL NUEVO SOL

Yo vengo de una familia muy grande. En mi familia somos, bueno, éramos seis. Uno de mis hermanos falleció hace un año. Yo me llamo Christina y soy la menor de toda la familia. Antes de mí, hay cuatro hombres y una mujer. Mis padres todavía siguen juntos, gracias a Dios.

Podría escribir un artículo por cada uno de mis hermanos, pero hoy quiero compartir la historia de mi hermano mayor. Mi primer hermano es Arnulfo, el primer hijo de mi madre. Mi madre se casó a los 15 años. Desafortunadamente, el esposo de mi madre murió cuando ella estaba embarazada. Cuando mi madre cumplió 19 años, ella se mudó a los Estados Unidos con una hermana. Aquí conoció a mi padre y juntos tuvieron tres hijos varones, una mujer y al final, yo. Mi madre dice que los años más felices de su vida fueron cuando ellos vivían en México y todos sus hijos eran niños.

Mi hermano más grande, Arnulfo, creció creyendo que mi padre era también su padre. Pero un día, cuando él tenía 15 años, mi abuelo, el papá de mi papá, le dijo la verdad. Mi hermano corrió a donde estaban mis padres y les preguntó si eso era cierto. Mis padres le dijeron que sí. Nunca le dijeron que el primer esposo de mi mamá murió porque no lo querían lastimar.

En ese tiempo, mis padres regresaron a Estados Unidos y fue entonces cuando sus vidas cambiaron para siempre. Arnulfo era un muchacho muy inteligente y guapo, él tenía muchas novias y amigos. Un día, decidió salir a una fiesta con sus amistades, pero en ese tiempo, mi hermano ya había cambiado mucho. Ya no era el mismo.

Se juntaba con muchachos más grandes que estaban en pandillas y usaban drogas. Esto ocurrió en 1999, cuando mi hermano y otros amigos fueron responsables por la muerte de otro compañero de escuela. No es claro quién cometió el crimen, pero los policías sí saben que mi hermano Arnulfo estuvo allí.

Por muchos años, él huyó. Y finalmente, se dio por vencido un día. Mi hermano estaba muy lastimado porque mis padres le mintieron acerca de quién era su padre. Mi hermano se había escapado, huido, se fue a México, pero finalmente fue arrestado y estuvo preso. Ésta no fue la única razón por la que mi hermano estuvo preso. También fue castigado por estar allí cuando alguien fue asesinado, pero después de pasar años en la cárcel, mi hermano salió libre.

Mi hermano Arnulfo usó drogas por 10 años. Usaba cristal, una droga muy fuerte. Lo hacía para no estar en este mundo y no sentir su dolor de no conocer a su padre. Su historia es muy especial para mí porque me hizo creer en los milagros. Había días que yo le pedía a Dios que se llevara a mi hermano porque yo oía a mis padres pelear y a mi madre llorar mucho, y yo le decía a Dios: “Si no vas a cambiarlo, llévatelo”.

Yo solamente tenía diez años en este tiempo, pero crecí muy rápido por la vida que llevaban mis hermanos. Mi hermano fue llevado a la cárcel otra vez. Esta vez lo detuvieron por siete años. Después de cumplir su condenda, mi hermano salió y nunca fue el mismo. Dios cambió a mi hermano y a nuestra familia para siempre.

Mi hermano Arnulfo en el gimnasio, saludable, después de 20 años de paz. Foto cortesía de la autora.

Ahora, son 15 años desde que mi hermano ha estado fuera de la cárcel y su vida es un testamento de Dios. Es un hombre ejemplar. Todo lo que pasó en su vida fue para dar un ejemplo de preseverancia y fe en Dios.

Lo que mi familia sufrió por casi 20 años fue algo que muchas familias sufren. Yo quisiera darle fuerzas a otra chica o chico como yo. Con perseverencia, paciencia y fe, todo puede cambiar. Debemos amarnos y darnos mucho apoyo. Si tu familia necesita ayuda, hay muchos programas para familias que sufren de hijos o hijas que usan drogas o se encuentran en prision.

Aquí hay algunos recursos que pueden ayudarte:

Prison Fellowship.

Addiction Support Groups in Los Angeles.

Tratamiento y recuperación de la adicción a las drogas.


Tags:  #voces addicción cárcel Christina Rodríguez cristal prisión

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Christina Rodríguez Barragán
Hola chicos y chicas, me llamo Christina Rodríguez y soy estudiante de periodismo en CSUN. My corazón está partido entre la política y el mundo del entretenimiento. A mí me encanta viajar con mi prometido, leer poemas de amor, y me siento lo más viva cuando tengo el honor de entrevistar a alguien. Mi trabajo en El Nuevo Sol está aquí.




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