Noticias / 02/09/2009

¿Cómo funciona ROTC en CSUN?

Rio Miner, oficial ejecutivo de ROTC en CSUN, dice que las fuerzas armadas no se están enfocando en reclutar latinos. (Fotos por Adolfo Flores / El Nuevo Sol)

Rio Miner, oficial ejecutivo de ROTC en CSUN, dice que las fuerzas armadas no se están enfocando en reclutar latinos. (Fotos por Adolfo Flores / El Nuevo Sol)

Por ADOLFO FLORES

A la mayoría de estudiantes les da escalofrió sólo pensar en despertarse a las cinco de la mañana, pero para Colin Hensley, un estudiante de CSUN de 23 años, eso es muy común. Pero Colin no está solo. Otros 45 estudiantes lo acompañan en los entrenamientos del Centro de Entrenamiento de Oficiales de la Reserva (ROTC) en CSUN.

Como parte del entrenamiento físico, los estudiantes tienen que correr de tres a cinco millas y hacer lagartijas hasta que los músculos les duelan. Además, los miembros del programa deben ser estudiantes a tiempo completo y tomar clases de ROTC, aparte de sus clases regulares.

“Es demasiado exigente y a veces puede ser estresante”, dijo Hensley, comandante de su compañía. “Pero vale la pena porque tienes el gran apoyo de un excelente grupo de amigos y cadetes”.

Como comandante de compañía Hensley coordina actividades con los otros líderes, y pasa como tres horas de su día llamando a gente, haciendo listas y respondiendo a correos electrónicos.

Los estudiantes hacen simulacros de combate los viernes, en donde las aptitudes de estudiantes de tercer y cuarto año son puestas a prueba mientras dirigen un escuadrón de nueve personas.

“El entrenamiento de liderazgo que nos dan es excelente porque nos enseñan a solucionar problemas y ser líderes bajo presión”, Hensley agregó. “Nos están entrenando para dirigir soldados en el campo, así que nos entrenan al nivel más alto”.

El propósito de ROTC es producir oficiales para las fuerzas armadas. Para hacerse un oficial, es necesario que los estudiantes obtengan una licenciatura y se hayan incorporado a través de un programa como ROTC.

“Los miembros enlistados generalmente son los trabajadores, aquellos que están en un sitio de construcción martillando clavos”, dijo el capitán Rio Miner, un oficial ejecutivo de ROTC en CSUN. “Los oficiales son más como los arquitectos, diseñadores y directores de un proyecto”.

Estudiantes de primer o segundo año pueden ir al programa libremente. Sin embargo, las cosas cambian una vez que lleguan al tercer año.

“Cuando empiezas tu tercer año tienes que firmar un contrato”, Miner comentó. “Desde ese punto, se espera que termines tus últimos dos años y te conviertas en un oficial”.

El contrato estipula que debes continuar y acabar tus estudios para después servir como oficial de las fuerzas armadas. El número de años que alguien debe servir como oficial depende si recibió beca o no. Son cuatro años de servicio activo y cuatro como reserva para los que recibieron becas. Los que no recibieron becas deben servir tres años de servicio activo y cinco como reserva.

Pero no todos terminan su contrato. Según cuenta Miner, una mujer que tuvo una crisis nerviosa y un estudiante que le dijo que era homosexual no tuvieron que honrar su contrato.

Miembros de ROTC también pueden ser echados por recibir bajas calificaciones, ya que no cumplirían con una de las tres características que busca el programa: líder, atleta y estudiante.

Sin embargo, el programa ha sido blanco de críticas. Para muchos, el ejército está reclutando gente de bajo recursos, principalmente Latinos.

“Te refieres al Iniciativa de Acceso Hispana y recibe mala publicidad porque se mira como que estamos enfocándonos en los hispanos, pero no es el caso”, Miner comentó. “El concepto no era ‘tenemos que reclutar minorías’… era asegurar que hay personas de liderazgo que están a la altura de las personas que están dirigiendo”.

El capitán Brian Johns, comandante del programa y oficial de operaciones de reclutamiento, dice que el supuesto enfoque en latinos no es verdad.

“Yo creo que si la gente realmente lo cree deben de hablar con personas en el ejército y preguntarles de donde son, que hacen y porque son parte del ejercito” Johns dijo, “pero no creo que es verdad que nos tratamos de enfocar en personas de bajo recursos”.

Para Hensley, ser parte del programa ha sido una experiencia única y lo compara a una fraternidad. Aunque a veces el programa es criticado, él siente que la mayoría de la gente en CSUN son muy respetuosas con ellos.

“Hay algunas personas en la universidad a las que no les gustamos porque no entienden que es ROTC”, Hensley dijo. “Yo creo que si se sentaran y nos oyeran hablar tuvieran un major entendimiento de lo que es ROTC, qué hacemos y quiénes somos.”


Tags:  Adolfo Flores

Bookmark and Share




Previous Post
Activista informa a jóvenes sobre fuerzas armadas
Next Post
Activista, veterano de Irak mantiene limpia su conciencia



Adolfo Flores




You might also like






More Story
Activista informa a jóvenes sobre fuerzas armadas
Por MERCEDES AGUILAR Pablo Paredes decidió enlistarse en el 2000 en la Infantería de Marina de Estados Unidos para...