Jóvenes luchan por un futuro mejor dentro y fuera de Estados Unidos

Por JACQUELINE GUZMÁN GARCÍA
EL NUEVO SOL

California State University, San Marcos.

El controversial tema de los estudiantes indocumentados en E.E.U.U. se ha ido incrementando a medida que ellos luchan arduamente por lograr que sus esfuerzos sean reconocidos mediante una legalización de su estatus migratorio. La ya conocida Acta del Sueño federal (o Dream Act) ha estado en debate por más de 10 años. En el 2007 y 2010, falló su aprobación en el congreso de Estados Unidos por ocho y cinco votos respectivamente.

Sin embargo, de los más de 65,000 estudiantes que se gradúan cada año de preparatorias estadounidenses, sólo cinco por ciento continúa su educación universitaria, de acuerdo al Comité Nacional de Legislaturas Estatales (NCSL). La falta de información, ayuda financiera y motivación personal han sido los obstáculos más comunes para que estos jóvenes puedan continuar su educación.

En 1982, la decisión de la Corte Suprema de Justicia del país afirmó en Plyer vs. Doe el derecho de todos los estudiantes (sin importar su estatus legal) de tener acceso a la educación pública desde el kínder hasta el décimo segundo grado (la educación media o preparatoria). No obstante, la sección 505 del Acta de Reforma Migratoria Ilegal (IIRIRA) estableció en 1996 que después de graduarse de la preparatoria, “cualquier [estudiante] que no esté legalmente en E.E.U.U. no es elegible para obtener educación superior” pública.

La pregunta que muchos jóvenes se hacen es: ¿Qué hacer después de graduarse?

Lo que pocos saben es que hay diferentes opciones. La primera: el continuar con estudios universitarios, debido a que varios estados de la unión han aprobado leyes que permiten a estudiantes sin papeles atender universidades y colegios comunitarios pagando colegiatura como residentes de esos estados, sustancialmente más baratas, siempre y cuando hayan cursado un número determinado de años de su educación media en dicho estado.

La segunda opción es menos conocida pero existente desde hace varios años: la categoría del grupo de estudiantes que en algún momento fueron “indocumentados”, y debido a su motivación personal, han decidido regresar a sus países de origen a completar sus sueños de una educación superior o de un posgrado académico. Se trata de estudiantes graduados de preparatorias y/o de universidades norteamericanas que regresan a sus países después de haber obtenido su educación en Estados Unidos.

En esta serie de artículos escritos, entrevistas en audio y videos, estos estudiantes le cuentan al público de El Nuevo Sol sus experiencias de vida y la trayectoria que los ha llevado a convertirse en personas exitosas dentro y fuera de la frontera estadounidense.

Para ver la serie completa pulse aquí.

 

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El siguiente mapa interactivo describe leyes que han sido aprobadas para que estudiantes indocumentados puedan atender a universidades estadounidenses pagando colegiaturas accesibles.


View Colegiatura accesible para estudiantes indocumentados in a larger map


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